Rockeros de los jueguitos: Tim Follin, el loquito del Rock N’ Roll Racing

Llevo en mis oídos la más maravillosa música que, para mí, es el sonido de los jueguitos, reza un dicho popular de nuestro país. Y no es para menos, digo, acá desde Ludopharmacos siempre hablamos de los juegos, sus historias, las perspectivas sociofalopa que encarnan y por supuesto, la música: un componente infaltable en las horas infinitas de desvelo, cervezas y estupefacientes varios.

Hoy para retomar vamos a hablar de Tim Follin, uno de los más maravillosos y prolíficos compositores que el mundo videojueguil nos supo dar. Tim nació en el 70 y desde el 85′ que comenzó a invadir el mundo con las notas digitales de su cabeza. Vamos a hacer un repaso sobre la obra de este crack.

En los ochenta el mundo estaba plagado de máquinas que no se sabía si eran computadoras o consolas: equipos como Commodores, Spectrums o MSXs plagaban el mercado -y siempre, por supuesto, cientos de copias o clones. En ese entonces Tim Follin incursionó por primera vez en la música de los jueguitos dedicándose a crear música para muchos títulos de Spectrum.

El primero de ellos se llama Subterranean Stryker, un juego de plataformas ambientado en el espacio o algo así. Salió en el 83 y solo pudimos conseguir este fragmento:

Para los entendidos en esto de la música pueden notar un cierto dejo de estilo clásico. Esto se corresponde inmediatamente con su titulo posterior, el Star Firebirds, un shoter de navecitas, cuya música estaría basada en una composición de Stravinsky llamada The Firebirds. No pudimos encontrar la música en youtube pero si pudimos descargarla. El archivo del sountrack está en un formato .ay, que debe ser propio de la Spectrum. Intentamos subirla a nuestro canal pero no pudimos porque youtube no reconoce ese formato y una busqueda de un conversor a ese formato solo nos llenó la computadora de bichos. Pese a todo, la pueden bajar y escuchar en el VLC.

Otro gran juego de Spectrum en el que este mostro estuvo implicado fue el Vectron (también del 85) de música completamente acorde al delirio electrónico de los 80′.

En el 87 salia, también para Spectrum, The Sentinel, uno de los primeros -sino el primero- juegos en mostrar un «mundo en tres dimensiones» lo cual causó un revuelo de la san puta. Acá también estuvo Tim tirando magia. No hay un soundtrack en youtube pero tenemos 7 gameplays que duran 12 horas cada uno.

Para ese año el tipo también adaptó para la Spectrum, junto con su hermano, la música del clásico Bubble Bobble.

El tipo hizo mucha música de jueguitos de Spectrum pero podemos dar por finalizado su ciclo con esa consola cuando en el 91′ creó la música para la versión del mítico Gauntlet III para dicha consola:

Dejamos los de Spectrum y volvemos otra vez al 87, año en el que creó la música para las versiones de Amiga y Atari ST del Renegade (juego que inauguró la saga Kunio Kun)

Al año siguiente vino la secuela para NES.

Para el 89′ Tim creó/adaptó la música del clásico Ghouls’n Ghosts para Amiga/Commodore y Atari ST

Llegado el año 90′, Tim creó la música para el Silver Surfer de NES, una de sus obras más destacadas y valoradas por los jugones de todos los tiempos debido a su complejidad y majestuosidad.

En el 91 salia el Indiana Jones and the Last Crusade para NES y también estaba Tim haciendo de las suyas:

Tim no laburo mucho para Sega si lo comparamos con la cantidad de juegos que sacó para NES y SNES; de los juegos de la consola del erizo podemos nombrar el Batman Forever y un spiderman que no conocía:

Todo esto fue una inmensa introducción para hablar del magnus opus de Tim Follin y a estas alturas me imagino que sabrán de qué estoy hablando.

Me pase gran parte de mi infancia yendo todos los días a alquilar este cartucho. Lo jugué, gane y re-gane cientos de veces y probablemente sea uno de los juegos que más alquilé en toda mi vida; durante al menos un mes le pagaba un peso diario al loco de MasterGames, uno de los videoclubes míticos de Campana. En este juego no solo aprendí que las carreras podían ser divertidas si les poníamos destrucción y extraterrestres, sino también descubrí la música que me acompañaría durante toda mi vida.

Acá Tim logró adaptar los grandes clásicos del Rock a los 16 bits de una manera sublime. No puedo decir más nada sobre esta obra maestra.

Es difícil hablar después del Rock N’ Racing, que salió en el 93′. De ese año hasta el 2006 siguió componiendo para videojuegos, siendo el Lemmings para PSP el último.

Cabe mencionar también que hizo la música para el Ecco the Dolphin: Defender of the Future, para la extinta Dreamcast -consola solo valorada por nuestro amigo Eugenio.

Para los más jóvenes, los Ecco the Dolphin fueron una serie de juegos de Sega sobre un delfín super inteligente que no quería ser comido y tenia que salvar al resto de los animales del mar de la depredación de los barcos japoneses que hacen mierda todo. O al menos eso es lo que recuerdo.

Bueno, este fue un breve repaso y reconocimiento a uno de los más grandes compositores que el mundo videojueguil nos supo dar. Hay decenas de juegos que quedaron afuera de este brevísimo listado; pueden chequear acá y ver la lista completa.

Nos vemos en la próxima entrega,

Saludos

Esteban.

3 comentarios en “Rockeros de los jueguitos: Tim Follin, el loquito del Rock N’ Roll Racing

Deja un comentario